ME QUEDÉ CORTO CON
RAZIA en el Parque de los Escritores Merideños
Si no lo has hecho, para mejor comprensión de este escrito, debes leer este enlace, también presente en el título.
En la medida en que el fascismo impune me permite salir y recorrer la ciudad, voy constatando el verdadero alcance de la razia contra los monumentos de Mérida perpetrada bajo la sombra del estado de zozobra en que sumió a la ciudad la oposición irracional Por esto, los casos expuestos aquí estarán incompletos hasta cuando pueda visitar sitios donde sospecho se cometió el mismo delito.
A los monumentos señalados en el escrito del enlace del título, debo agregar el robo del busto de María Teresa Rodríguez del Toro, de la avenida Las Américas, frente al CC Cantaclaro, el mismo cuyo intento de robo denuncié en abril de 2015 ante el organismo a cuyo cuidado se encuentran las estatuas merideñas. En esa oportunidad fue detenido el proceso de robo, reasegurándose el busto al pedestal, trabajo que no valió ante la decisión de robárselo. En ese organismo me explicaron la forma de anclaje de los bustos para evitar robos, pero los del Parque de los Escritores Merideños no estaban fijados como se me indicó, sino de una manera menos segura.
Pero donde se combina la osadía de los pillos con la incuria de las autoridades, es en el robo de placas de monumentos y cartelas en el casco central y, escandaloso, en el mismo edificio de la gobernación. La placa del busto de Manuel Mujica Millán, ubicado en el extremo oeste del edificio de la gobernación, fue robada, además de dos cartelas fijadas en el chaflán oeste del mismo edificio. El sentimiento de vergüenza debió ser mayúsculo, porque inmediatamente retocaron y pintaron las huellas dejadas, dejando la pared como si nunca hubiese albergado una cartela.
Pero los robos en la mismas narices de las autoridades no terminan con el descrito, sino que también fue robada la cartela que identificaba la Casa de la Cultura Juan Félix Sánchez, diagonal a la gobernación y la placa puesta al pie del guayacán (araguaney) que sembro en la Plaza Bolívar, frente a la catedral, Juan Pablo II cuando visitó a Mérida. Un poco más arriba, las tres cartelas que estaban en la Casa de los antiguos gobernadores de Mérida, también fueron sustraídas. Lo mismo le pasó a la placa del busto de Germán Briceño Ferrigni, ubicado en la Cruz verde de Milla, al inicio del enlace que lleva su nombre. Repito, es un inventario incompleto, porque sospecho que hubo más robos y que ante la impunidad total, no se detendrán.
Ante esta escandalosa situación, ¿ha habido alguna reacción de las autoridades, además de la de esconder las evidencias del robo más vergonzante? ¿Se denunció oficialmente a los cuerpos policiales para una investigación? ¿Puede la ignorancia llevarlos a considerar este delito poco importante? Estoy haciendo una denuncia, un llamado de atención, un reclamo ciudadano. Es evidente que está actuando una banda bien organizada, en una acción bien planificada, que no se detendrá y se realiza simultáneamente con una campaña de grafitis que está cubriendo los muros de la ciudad. Esta banda ha colocado en el mercado negro de metales de Mérida, más de media tonelada de cobre.
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| Busto de Manuel Mujica Millán (Costado este del edificio de la Gobernación del estado) sin la placa de identificación |
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| Base de placa robada (pie del araguaney plantado por el Papa Juan Pablo II) |
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| Sitio de cartela robada (Casa de los antiguos gobernadores de Mérida) |
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| Sitio de cartela robada (Casa de los antiguos gobernadores de Mérida) |
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NUEVA INFORMACIÓN
24/06
A las cartelas robadas en el casco central, agregamos dos:
* En la entrada de la Sala Febres Cordero.
* En la Av. 3, edificio de la esquina con calle 20, que tenía el siguiente texto: AQUI ESTUVO LA / CASA DEL CORONEL / IGNACIO PAREDES / HEROE DE LA / INDEPENDENCIA
Constaté que uno de los bustos más expuestos y en proceso de robo, el de Oscar Quintero Straus, (amigo de universidad, con quien compartí más de un año de estudios) sigue en su destino de La Candelaria, enlace La Parroquia-Los Curos. Denuncié formalmente a la policía el estado en que se hallaba en abril, y a pesar de que no me consta ninguna acción para evitar el robo, este no ha sido completado. La fotografía de la izquierda, es del 29 de abril ; la de la derecha, de hoy, 24 de junio.
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