PLAN 465
PLAN 465
PLAN 465
En el 465˚aniversario de la fundación española de Mérida se anunció como regalo de cumpleaños recursos para remozamiento del centro histórico de la ciudad, información que ha ampliado el gobernador del estado en varias oportunidades (por ejemplo, en este video: https://www.instagram.com/reel/Cyj5U4FMdwU/)
Se consideró que era importante la presencia del Centro de Historia del Estado Bolivariano de Mérida –CHEBM– en la comisión asesora de esta obra, lo que indudablemente es así, pero cuya intención se quedó en eso, pues no se hizo efectivo. Como integrante de este organismo quiero transmitir ideas de cómo debiera enfrentarse un proyecto de esta naturaleza.
La situación óptima conllevaría el conocimiento de la historia urbana de Mérida, las intervenciones mayores en sus 465 años de historia y el análisis de hacia adonde debe apuntar la ciudad en el proyecto socialista, así como los proyectos que no se cumplieron o están en marcha y experiencias semejantes en otros lugares del mundo. Todo, para determinar la situación urbana actual y las características de un proyecto macro para la solución integral de los problemas urbanísticos, con objetivos y etapas claramente establecidas.
Y es en este proyecto macro donde se ensamblaría el PLAN 465, de manera que no sea una intervención aislada sino etapa cuyo alcance está determinado por los recursos disponibles y la obtención de futuros.
Celebramos la voluntad y rapidez con que se procedió, méritos que no siempre bastan.
El proyecto debió contemplar un estudio general de la historia urbanística de la ciudad y su futuro. El estado de la cuestión (sobre todo la evaluación del último –y costoso– plan de intervención durante el gobierno de A. Ramírez).
El establecimiento de los objetivos generales del plan, que sobrepasen los meramente estéticos del programa Venezuela bella y que prevalecen en los anuncios hechos.
El inventario de edificaciones, sitios, plazas… que deben ser intervenidos, considerando su evolución y las intervenciones que pudieron desvirtuar las obras originales.
El establecimiento de medidas legales preliminares y convenios interinstitucionales (poderes públicos, universidad e iglesia católica) y con particulares.
Los criterios de ejecución, etapas y supervisión del proyecto.
Pero como el problema urbano no es sólo físico, debe abordarse integralmente. El saqueo de monumentos y mobiliario urbano, el buhonerismo, los abusos del comercio formal, el tráfico, la contaminación sónica, los riesgos peatonales, los errores de la arborización… son problemas que no deben dejarse de lado.
Reconozco lo expuesto como un diseño de escrito, hecho con el apremio de los plazos que se han puesto en juego.
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AGRADEZCO LA DIFUSIÓN DE ESTE ESCRITO POR CUALQUIER MEDIO
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